jueves, 30 de junio de 2011

lunes, 27 de junio de 2011

Summer days...

Volver a poner aquellas viejas sandalias, caminar bajo el sol rumbo a la playa, el olor a mar, construir castillos de arena, el olor a crema de protección solar (nivel 50 para mí), recolectar caracolas diversas, que me recuerden aún más lo blanca que soy de piel, sentir la arena bajo mis pies, escuchar el sonido de las pequeñas olas al romper en la orilla, sentarme a observar las tierras del otro lado del mar desde las rocas, darse un chapuzón, un helado a media tarde, partida de cartas, el placer de echarse una siesta bajo el sol, leer en la terraza al anochecer, pasear cuando atardece y todo el mundo se marcha, quedarme allí sentada hasta que se vaya el sol, andar descalza....

Echaba de menos los días de verano. 

lunes, 20 de junio de 2011


[...] A sonreír se aprende habiendo llorado mucho.
Y una matización importante. No confundirse. Sonreír no tiene nada que ver con reír. Simplemente comparten letras. La sonrisa crece. La risa estalla. La sonrisa calla. La risa berrea. La sonrisa escucha. La risa habla. Pero si se puede sonreír incluso mientras se llora. Con eso está todo dicho. 
De cualquier modo, si hay algo que realmente me fascina del acto de sonreír es lo mucho que se obtiene frente a lo poco que cuesta. Lo poco que abunda frente a lo gratis que es.

("El teorema de la sonrisa”, R. Mejide)

sábado, 11 de junio de 2011

"Confío en ti"

Tan sólo tres palabras, pero que significan tanto...