jueves, 21 de agosto de 2008

Él

Era una estrella caída del cielo
y lo único que deseaba era seguir siendo estrella.
Era un ángel al cual cortaron sus alas
cuando quiso emprender el vuelo.
Era un vagabundo que tras las rejas de la noche
se aferraba a su soledad.
Era un alma soñadora
que tenía miedo a soñar.
Era las lágrimas derramadas en la despedida,
era aquel al que Cupido no quiso ayudar.
Era un folio en blanco, con muchas historias por contar.
Sus deseos eran quimeras permanentes,
no tangible realidad.
Era aquel cuerpo sin destino
que guardaba en su interior los girones de su libertad.
Sin embargo, y a pesar de todo,
era la sonrisa que jamás se puede olvidar:
esa sonrisa que te llena el corazón igual que beso,
esa sonrisa que te acaricia el alma,
y en la cual se reflejaba la esperanza.
Y aunque las circunstancias fueran adversas,
y aunque él no lo supiera,
era esa estrella que brillaba en el cielo,
ese ángel que luchaba por vencer sus miedos,
ese ser confidente que un día encontrará su lugar en este universo,
esa esencia que logrará el amor eterno,
esa sonrisa especial,
sin la que este mundo no sería el mismo,
sin la que ya nada sería igual.

1 comentario:

Tinkampinho dijo...

Pues si, mi otra pasión es el mar xD
Como siempre bellos tus textos, llenos de importancia y sentimiento.
Yo jamas llegaria a escribir algo asi xD.
Salu2 bsss