sábado, 15 de noviembre de 2008

Un lápiz para dibujar sonrisas; un te quiero guardado siempre en el bolsillo izquierdo de la camisa, ahí al lado del corazón; una mano suave que recoja con cuidado las lágrimas que resbalan por mi mejilla; una voz que me susurre: confío en ti, ahora confía tú en ti misma; unos ojos que expresan aquello que no dicen las palabras; flores silvestres para curar las heridas; y esa fortaleza para echarse los problemas a la espalda.

Eso es lo que has hecho y sigues haciendo: dibujar sonrisas, ayudarme sin dudar en todo momento A veces creo que cargas demasiado con mis problemas, porque tal vez este pequeño desastre no puede con todo ella sola. A veces creo que serías capaz de echarte a la espalda mi mundo entero. Perdóname, no es justo que siempre lleves tanto peso.

Dicen que no siempre se recibe lo que se da; yo aún te debo mucho.

4 comentarios:

Karela dijo...

que bonito snif ;_; yo tambien quiero alguien que me dibuje sonrisas
un beso a los dos, os lofiu

Princesa_DeAquelViejoReinoPerdido dijo...

Pues síguele dando mucho al dueño/a de ese lápiz, al susurrador de ese te quiero, al que mueve la mano, al que se enconde tras esos ojos... porque nada, NADA vale mas que un amigo. Ni siquiera nosotros mismos.
Un beso hada, precioso texto, como todos y cada uno. Tienes un estilo único.

Horacio dijo...

Me ha gustado mucho... ya has encontrado dos veces la forma de llegarme... jeje...
deveras que a veces llegas a escribir con tus manos lo que quisiera decir mi boca...

Un saludo... y sigue asi

Miguel dijo...

Hola, esta es mi primera visita y me encontre con un bello texto, muy lindo en verdad. Ten por seguro que estare regresando, pues ya he agregado tu blog a mi lista en el Cerebro en Renta...

Saludos!